sábado, 25 de junio de 2011

érase una vez un hada...


Vireya y Catia eran Hadas, usuarias de la misma Crisálida, y por ello prácticamente hermanas. Eran las hadas de los animales. Pero mientras que a la llamada de Catia acudían ardillas, ciervos y mariposas; la llamada de Vireya convocaba gatos, serpientes, lagartos; en definitiva, animales de piel o pelaje oscuro. Podía tener relación con su físico, pues Vireya tenía los ojos y el cabello oscuro como las sombras. En cambio, Catia desprendía claridad por su cabello blanco y sus ojos transparentes. Decían que reflejaban el color de aura de las personas, como si fueran de espejo. Las dos tenían la piel muy clara, ojos rasgados y demasiada hermosura. En el pueblo se murmuraba que Vireya era bruja, debido entre otras cosas al rabo de rata que llevaba colgado de su cuello y el cual, contaban las malas lenguas, se movía de un lado a otro, como si ella torturara en su bolsillo a la rata a la cual pertenecía. Ellos no sabían que lo necesitaba para atraer a su águila. En cambio, la gente llamaba a Catia la paloma de nieve. Quizá ya se habían dado cuenta de algo, pues tanto Catia como Vireya podían traspasar su alma al animal de su elección, es el poder de las hadas de los animales. Vireya solía entrar en su águila real, mientras que Catia lo hacía en una paloma blanca.
La historia cuenta que las dos hermanas se enamoraron del mismo hombre, un druida llamado Travis de Rondia, cuya misión era la de proteger a las dos Antiguas. Había sido elegido de entre todos por poseer un extraordinario poder de canalización. Se contaba de él que sus susurros calmaban fieras. Su madre había sido una Antigua cuya Crisálida hacía enloquecer cualquier criatura con solo oír su voz. Y algo debió de traspasarse en la herencia a Travis. Él fue su protector, una especie de lazo que las mantuvo unidas durante años, asegurando la armonía entre ellas.
Pero su relación se marchitó el día en que un amor sobrenatural convirtió dos almas en una sola.
La noche en que Vireya descubrió el amor de Travis por su hermana, el mundo quedó hundido en una hecatombe de tripas, sangre y chillidos. Murciélagos, cuervos  y reptiles sumieron al pueblo en la peor de las muertes. La ira de Vireya no encontraba obstáculos, y llevó a cabo toda una masacre. Colmillos desgarraron gargantas; el veneno sumió en delirantes pesadillas a los habitantes, y pocos sobrevivieron a la plaga. Nadie se atrevió nunca más a dormir, menos a soñar, solo querían olvidar ese castigo que atribuyeron al diablo.
Loca de celos, Vireya cambió su forma humana por la animal, vigilando desde el cielo con un pico de guadaña y garras como hoces. Sus plumas como puñales reflejaban la traición de su hermana. Su poder aumentaba, perdida ella en la inconsciencia del águila real a la que trasmutó su alma.
Todo terminó el día en que Catia se convirtió en paloma blanca. La rapaz aprovechó para atacar, y su vuelo en picado apuñaló la tormenta. Cayeron del cielo plumas blancas como trozos de ángel, y los habitantes del pueblo lo tomaron como un regalo divino. Gotas de sangre como perlas cubrieron la tierra; almas blancas surcaron el cielo, cada una de las vidas que los ojos de Catia habían salvado. Las garras de Vireya quedaron hendidas, para siempre, en la belleza de su hermana.
Travis de Rondia, viendo fracasada su misión, la maldijo antes de terminar con su vida, y su grito sumió en la locura a quienes lo oyeron.
En cuanto a Vireya, recuperada la ética en su forma humana, contemplaba la sangre en sus dedos cuando se dio cuenta de la atrocidad de su asesinato. Se cuenta que, desesperada, se quitó la vida al convertirse en piedra, pues así su alma maldita no se reencarnaría en otra criatura. Se dice que apareció, de un día para otro, la estatua de la Antigua en el centro de este claro; y que de tanto venir su águila en su busca, terminó por convertirse en piedra, quedando así unida a su dueña.

Gema María Azorín








No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comenta, comenta, ¡no tengas miedo! Siempre devuelvo los comentarios, así crecemos todos juntos. Si vas a poner spoiler acuérdate de avisar, para no arruinarle a nadie una buena lectura.